Tu deseo sexual, sea cual sea, es completamente normal
¿Sientes que tu pareja y tú no estáis en la misma onda en el dormitorio? No estás sola. Según un estudio publicado en el Personality and Social Psychology Bulletin un deseo sexual no sincronizado puede de dividir incluso a las parejas de revista asegurando que el 39% de los hombres y el 27% de las mujeres dejarían a su pareja por una libido que no coincidiera con la suya.
¿Significa esto que estamos condenadas a un ciclo interminable de citas hasta que encontremos a nuestra alma (sexual) gemela?
Antes de tomar medidas drásticas, ten en cuenta que el impulso sexual no es más que una fachada mediática ingeniosamente diseñada y que tu relación es mucho más fuerte que estos clichés obsoletos.
Usamos el término “impulso sexual” porque suena pasional y sensual, porque seamos realistas, el sexo vende. Pero este apelativo popular de la cultura pop hace que muchas de nosotras nos sintamos poco sexis. Cuando nos encontramos repitiendo “esta noche no, cariño” como un disco rayado y deseando tener el mismo ritmo sexual con la cuadrilla de Carrie Bradshaw en Sex and the City, dañamos nuestra autoestima e identidad sexual. ¿Necesitamos estar siempre con ganas para mantener nuestro estado de diosa empoderada? El mito del impulso sexual no es diferente del resto de los estereotipos impuestos por los medios que hacen que las mujeres inteligentes cuestionen su valor. No hay una forma única y correcta de ser mujer, y no hay una forma incorrecta de querer sexo.
Escucha a la Ciencia
La realidad es mucho más científica que la sexualidad en sí misma, y afortunadamente todos esos rumores acerca de que tu vida amorosa se está yendo por el desagüe porque tu impulso sexual sea bajo o inexistente no son verdad, según la educadora sexual y autora Dr. Emily Nagoski. Biológicamente, un “impulso” tiene que ver con la supervivencia. Sin el impulso de comer y beber, moriríamos. Los impulsos literalmente nos mantienen con vida, pero el sexo no es una situación de vida o muerte. Lo que sentimos para el sexo no es un impulso sino deseo, y simplemente no hay forma de que podamos comparar nuestras necesidades y deseos, ni siquiera nuestra pareja.
Nagoski descompone el deseo sexual en dos categorías: deseo espontáneo y deseo receptivo. Lo que la mayoría de las mujeres dicen que sienten es un deseo receptivo: una reacción a los estímulos sexualmente excitantes, como un beso suave en el cuello junto con un par de manos fuertes alrededor de la cintura. Lo que se les enseña a las mujeres que deben sentir es el deseo espontáneo, un ataque aleatorio de calentura que puede atacar en cualquier momento, que es mucho más raro y más comúnmente informado por los hombres.
Solo el 10-20% de las mujeres se sienten espontáneamente excitadas. Sin embargo, cualquier tipo de deseo es posible y totalmente natural para cualquier género, pero eso no impide que las grandes empresas intenten sacar provecho de nuestras inseguridades y problemas corporales.
Sí, eres del todo normal
Las prácticas comerciales poco éticas, desde los medios hasta la industria médica, se han aprovechado de las mujeres convenciendonos de que somos demasiado o no somos demasiado sexuales, o no lo suficientemente sexis. Las compañías farmacéuticas tienen píldoras que prometen “arreglar” los impulsos sexuales menguantes, pero la ciencia detrás de tal marketing médico es casi pseudo-ciencia. Anhelar el sexo los 7 días de la semana no es más o menos normal que solo obtener esos sensuales hormigueos un par de veces al mes.
El deseo sexual saludable se trata de lo que te hace sentir bien A TI. Lo único que debería considerarse dolencia que requiera tratamiento es la falta de todo deseo y excitación, ya sea espontánea o receptiva, en mujeres que desean una vida sexual activa, y el remedio no requiere efectos secundarios químicos peligrosos. La terapia sexual y el asesoramiento de parejas pueden ayudaros a ti y a tu pareja a encontrar las herramientas para devolver la chispa al dormitorio con un enfoque adaptado a sus necesidades específicas.
Ama a la persona con quien estás
El deseo sexual encaja perfectamente en la forma en que pensamos acerca de la imagen corporal y la autoestima: todos somos diferentes, y debemos celebrar y aceptar la forma en que estamos hechos de manera única. La clave es aprovechar tu energía sexual y aprovechar al máximo esos momentos en los que se enciende cuando siente que el fuego comienza a arder dentro de ti. Hablar con su pareja puede salvar la brecha de excitación e incluso llevar a nuevas tácticas de dormitorio sorprendentemente excitantes. Trae juguetes a la mezcla. Comprométete a probar algo nuevo al menos una vez al mes. Pasar más tiempo en el jugueteo de calentamiento. Tontead media hora sin quitaros la ropa. Y para aquellos momentos en que el estado de ánimo todavía no es el correcto, no descartéis daros amor propio….
El deseo viene en muchas formas, y el tuyo, ya sea un poco, mucho o en algún punto intermedio, es digno de celebración (y un beneficioso orgasmo).
Por favor ten en cuenta que los consejos ofrecidos por Intimina pueden no ser apropiados para tu caso en particular. Consulta siempre con tu médico si tienes preocupaciones específicas relacionadas con tu salud.
Original en inglés de Colleen Godin
Somos un colectivo de mujeres expertas en Intimina que amamos compartir nuestras experiencias, aunque a veces sean demasiado personales. Estamos seguras de que es tiempo de derribar los tabúes que existen alrededor de la menstruación, la maternidad y la menopausia para ser dueñas de nuestra propia salud femenina.